Carta para el Comendador Klaus

[Kario 535]

Jared revisa por última vez la carta, puesto que le ha llevado horas realizarla, una vez repasada la mete en un sobre, lo cierra y le pega el sello de la Orden.

Con la Luz, Comendador Klaus. Me gustaría agradecer que me acogiera como Novicio de la Orden, para mí es todo un honor y orgullo poder representarla, también debo decir que la estancia en la abadía esta siendo de lo más satisfactoria posible, hay buena comida y en abundancia y los catres son bien cómodos pero...quería informaros sobre algo que ocurrió ayer por la noche, concretamente en el barrio pobre de Villadorada. Quiero ser yo personalmente el que se encargue de informaros, antes de que os llegue algún rumor extraño. También me gustaría pediros consejo. Ahora procederé a explicar lo ocurrido. Ayer por la noche, termine mis tareas así pues decidí salir un rato y descansar, me dirigía al barrio pobre, y cuando caminaba por allí me extrañó la falta de seguridad en esa zona, justo cuando estaba pensando en eso, comencé a oír unos extraños gritos, así pues me dirigí inmediatamente a donde se escuchaba esos gritos, me encontré con dos hombres, uno era el posadero Joshep y el otro era un extraño tipo, que más tarde descubrí que se hacía llamar creo recordar ¿Don Guapo?.  Pero volviendo al tema, ambos estaban discutiendo, el posadero afirmó que le había robado le pregunté al otro tipo y no me contesto, miré buscando algún guardia por la zona, pero no había, solo eramos tres en aquella calle, cerca de la Capilla en reconstrucción. Ambos seguían discutiendo, así que decidí entrar y pararlos, el posadero paró y me escucho en todo momento...pero no puedo decir lo mismo de aquél tipo no me quería devolver el objeto robado, el cual era una daga, así que no usé la violencia contra él, pero si le dije que lo que estaba haciendo estaba mal, el hombre seguía resistiéndose a lo que yo le decía, tuve que ponerme algo serio y finalmente cooperó. Nunca antes había tenido que hacer algo así, es cierto que eso no es trabajo para la Mano de Plata, para eso está la Guardia, pero en ese momento no estaba, el único allí era yo...así que decidí llevarlo a la abadía y una vez allí, llamar a la Guardia. Le dije que jurara ante la Luz y dijese toda la verdad, pero me temo que ese tipo mintió ante la Luz. Me pidió comida y bebida, y se la ofrecí. Luego llegó el Montaraz Elegost y se lo llevó al calabozo. Así pues, si desea un informe más detallado, solo tiene que pedírmelo y así lo haré. Eso fue todo lo que ocurrió sino mal recuerdo, a muchos creo que no les gustó mi decisión de actuar así, solo intenté que dos hombres no se pelearan entre sí, no pude ver a ninguna autoridad encargada para ello, así que decidí actuar. Por ello me gustaría saber si actué bien o mal... Y en el caso de que lo hiciese mal ¿que debo hacer para la próxima vez que me encuentre en una situación así?... Por último quería comunicarle, Comendador, que sigo instruyéndome tal y como me lo pidió, leyendo tratados y libros sobre la Luz y debo decir que he encontrado mucha sabiduría en ellos. Solo espero saber usarla bien cuando sea el momento. Gracias por vuestra atención. Que la Santa Luz os guarde.                                                                                                                 Jared Miller, Novicio de la Mano de Plata.

Editado February 21, 2017 por Kario

[Malcador 2.009]

La respuesta es devuelta de mano de un iniciado de la Mano de Plata con el emblema de la orden al pecho.

 

Con la Luz, Novicio Miller. Los problemas que me comunica son comunes en el barrio pobre, discusiones por asuntos irrelevantes que muchas veces acaban con heridos o muertos son el pan de cada día en el Casco Antiguo. La guardia aparta la vista por falta de interés y capacidad de arreglarlo y en general las gentes del lugar viven contentas en ese ciclo malsano de inmundicia, por desgracia. Tiene usted razón que como miembros de la Mano de Plata nuestras labores están por encima de la ley de los hombres y su cumplimiento, no nos corresponde a nosotros atrapar a ladronzuelos, matones y esa clase de sujetos que si bien rompen las leyes, no son el mal para el que nos preparamos enfrentar. La causa de la Luz está sobre esas cosas mundanas. Dicho esto, como Paladines aspiramos a ser avatares de la Justicia, y esto pasa por entender y respetar las leyes del lugar donde nos encontramos, siempre y cuando estas sean justas.  Si se ve en la situación donde ve a alguien romper la ley, novicio, más no hay guardias a mano para detener la situación, haga lo que haría cualquier hombre de bien: En caso de una situación peliaguda, donde desconozca como en la que me ha descrito, la verdad o mentira de lo que ha ocurrido por no estar presente, acompañe, si no se resisten, a los implicados al cuartel de la guardia o milicias más cercano.  En situaciones más hostiles, donde vea a alguien atacando a otra persona, no hay ley o jurisprudencia que haya de impedirle entrar y evitar el derramamiento de sangre, aun que incluso en esas situaciones ha de buscar mantener la cabeza fría para disluncidar lo que ocurre y actuar de la mejor manera.  Sea equidistante y sea capaz de mantener la imparcialidad en esos momentos. La forma más sencilla es acompañar a todos los implicados, como ya le he dicho, ante la guardia, pues ellos sabrán como tratar el asunto. Verá que en muchas discusiones, los implicados ante la idea de ser llevados ante la guardia, rápidamente recularán en sus argumentos y cada uno volverá a su vida normal.  En caso de que haya resistencia y considere usted que hay motivos de peso para forzar al individuo o individuos a ir ante la guardia involuntariamente, hágalo. Aun que pueda haber problemas a posteriori, es peor el mal causado por inacción. Que las quejas del hombre y mujer de a pie no minen su ímpetu. La Mano de Plata estamos aquí para proteger la justicia y a la humanidad, y en eso se apoyará a los cuerpos de guardias y ejércitos siempre que haga falta. Lord Klaus, Comendador de la Mano de Plata en el Bosque de Elwynn