Nombre: Gwyn Lighstone
Raza: Humano
Sexo: Hombre
Edad: 22
Altura: 1,78
Peso: 74
Lugar de Nacimiento: Stromgarde (Reino de Stromgarde)
Ocupación: Bardo/Recluta del imperio
Historia completa
Descripción física:
En lineas generales y opinion de todos o al menos esa es la creencia que Gwyn mantiene es considerado objeto de belleza sin igual, dira incluso que hay quienes le atribuyen sangre elfica de forma totalmente reprochable esta y otras informaciones que el mismo de sobre si. La verdad mas simple es que Gywn es un humano de metro setenta y ocho de altura y unos setenta y cuatro kilos de peso, piel de tono oliva. En general luce una complexion que deja bastante que desear en cuanto que por muchos es considerado no particularmente fuerte o con una complexion atletica es delgado sin mas tanto de brazos piernas y la parte abdominal. Careciendo de musculos que haya entrenado a lo largo de su corta vida se ve reflejada la vida de excesos que vive con frecuencia, sus grandes ojos verdes con frecuencia decorados con ojeras se ven acompañados en la cara por una nariz bastante fina, pomulos afilados y una boca para los estandares pequeña.
Su cabello es de tonos pajizos, acostumbrado a portar siempre una larga cabellera quizas por aficion o por comodidad suele llevarla en una coleta bien contenida. Conjuntando esto luce lo que para su criterio considera un exquisito bigote bastante bien cuidado y con una densidad que no lo hace ver demasiado poblado. En lineas generales no destaca el bardo en apartado alguno. Como todos luce lunares por el cuerpo tambien cicatrices de "conflictos pasados" sin mas un hombre normal.
Descripción psíquica:
Gwyn esta acostumbrado a la buena vida, muchos son los excesos a los que se ve abocado debido a su condicion. Para los ojos que no le conocen sin duda su orgullo es equiparable al mas cerrado de los elfos, tenaz eso si, cuando algo se propone suele perseverar hasta conseguir lo que puede ser desde una botella de vino especiado hasta una mujer que le haya dejado un particular recuerdo.
Para la gran mayoria si se pregunta por la definicion de extrovertido Gwyn acude a la mente en el acto pues particularmente en los temas que le interesan o si no tratando siempre de desviar otros temas de indole diferente hacia los campos que controla no ceja Gwyn de hablar. Esto puede por muchos ser considerado agobiante, cansado mas por otros idolatrado. Demuestra una astucia natural y una inteligencia si bien no dentro de lo comun tampoco se presenta como uno de sus valores mas potenciales. Otro valor de Gwyn a tener en cuenta en este caso como punto negativo es bien su podria llamarse cobardia y pereza en la realizacion de tareas que no son bajo su elitista criterio de interes.
Con todo hay cinco cosas que Gwyn estima por encima de todo y que de por si dan para resumir sus vivencias, vino, mujeres, arte, su inseparable laúd y su propio cuello.
Historia
Ya la luna coronaba aquella noche el firmamento solo el eco de las gotas que la lluvia de la pasada noche trajo consigo logran romper el sepulcral silencio. Un gato dormita apacible bajo el resguardo de un banco. Un sorpresivo grito hace al animal con sobresalto su sueño abandonar y golpearse la cabeza contra la parte superior del banco al darse cuenta de que con prisa debia marchar, una lampara se hallaba encendida y el fuego de la vela otorgaba tenue imagen a lo que alli sucedia, aun con el frio reinante en el exterior la ventana se abria y a la calle en tromba descendian lo que parecian prendas de vestir y luego una bolsa que a peso mueto chasqueo contra el suelo empedrado. Toda clase de insultos se escucharon entonces algunos realmente creativos otros sencillamente clasicos conocidos entre todo el bajo y alto gentio del imperio, finalmente cuando todo el equipaje habia salido por la ventana un nombre semidesnudo se hallaba tambien en aparente intencion de seguir el mismo destino. La mujer forcejeaba decidida a arrojarlo, una finta en el momento preciso hizo que el hombre como si del gato escapando se tratara se zafase el en aquel momento mortal abrazo, corriendo escaleras abajo con solo unas calzas puestas el hombre se presento en la calle y recogiendo con sorprendente rapidez sus cosas salio de alli si bien hubiese podido volando.
Los gritos pronto quedaron atras y una sonrirsa de picardia en aquel joven rostro se dibujo, la taberna mas cercana le era conocida y sabia que en mitad de la noche era el lugar mas apropiado en que reposar, sobretodo junto a la chimenea si no queria perder dedos de pies, manos incluso algo peor. Mientras maldecia a la mujer se recomponia con sus cosas, pronto yacia ya vestido frente al fuego sabia que a aquellas horas pasaria desapercibido ya que no es extraño ver un hombre en paños menores alli despues de todo. Se ajusto su sombrero y pidio una pinta, la bebida bajo como si fuera elixir de un dios benevolente por su gaznate y poniendo sobre la mesa tintero, pluma y papiro penso con detenimiento. Tan traumatica experiencia al menos pensaba habian tenido recompensa pues la tragedia del amorio quebrado era fuente comun en poemas, convencido de que ya tenias las palabras se dispuso a tomar su laud y entonces.... !SU LAUD! no lo veia por parte alguna y sintiendose mas desnudo que cuando huia por las frias calles pronto recayo.
Esa mujer quizas fuera vengativa y pudiera asemejarse al mas fiero trol enfadada pero en definitiva no era tonta, habia guardado consigo la unica cosa que ciertamente tenia valor tanto personal como monetario y por la cual Gwyn maldijo su nombre. Su laud era si bien su metodo mas directo de sustento dramatizando mas como bardo que se consideraba era la razon de su existencia pues el escultor sin cincel, soldado sin espada o tabernero sin jarra nadie veroa logico un bardo sin su mas preciada "arma". Se decidio a volver sobre sus pasos con el mas sigiloso de los andares trepo por la ventana resultando ahora mas peligroso que cuando lo hacia tiempo atras con una intencion si bien mas sana. Como no cerrada tuvo que ingeniarselas para abrirla aunque con aquel odioso frio la tarea se tornaba dificil y hacerlo en desgana. Finalmente el seguro cedio y los pies fueron a parar sobre el suelo de aquel salon, las luces estaban todas extinguidas salvo por las ascuas de la lumbre que luchaban por perdurar entre las grises cenizas. La estancia apestaba a alcohol y un perfume de anacardos que en su día idolatro y en aquel momento le causaba una desconsolada tension. Un sobresalto Gwyn pego cuando el ronquido se escucho seguido del alivio vio como su "amada" dormitaba con una botella de vino por amante arropada en el brazo.
Vino por cierto que a Gwyn pertenecia pero sabiendo que habia perdido a su compañero siguio buscando con ahinco el anhelado instrumento, temia verlo astillado o es mas presa del fuego. Por suerte y gracia de su aguda vista lo localizo debajo del lecho de paja que tan buen recuerdo le habia ocasionado la jornada pasada, paso a paso controlando la respiracion, paso a paso se repetia a cada segundo hasta que finalmente y esta vez con mas calma se presento en la entrada con su laud a la espalda. El frio como era logico le recibio pero al contrario que horas antes esta vez Gwyn casi lo vio como un elemento de alivio y silbando la luz sabe que cancioncilla se perdio por las callejuelas de la ciudad de Ventormenta. Ya llego a su hogar cuando el sol comenzaba a asomar en la lejania, trato de ser sutil pero quizas antes de llegar a su casa hubiera vuelto a la taberna para claro esta pagar la pinta al tabernero y sea de paso tomarse cuatro mas. La puerta cerro con estruendo tras el y la familia alertada y esperando a un ladron se presento alli armados con escoba incluso un baston, quizas los señores no vieran que se trataba de su hijo pues recibio de misma forma el ataque que habria recibido quien fuera a hurtar. Nuevamente se escucharon toda clase de originales calificativos e insultos y nuevamente con mismo destinatario.
El padre de Gwyn de nombre Halford era mas regio que un capitan del imperio y se hacia notar cuando bien queria y aquel dia sin duda estaba ansioso por ello. Dos horas de larga conversacion buscando solucion a la vida de despropositos de su vastago, habian tratado de brindarle debido a su "acomodada" situacion una formacion digna y mas alla de sobresalir en la poesia cosa que ellos no entendian destacaba mas por borracheras que se postergaban demasiado y compañias de mujeres no demasiado beatas para juicio de nadie. Continuo el hombre hablando hasta que comprendio que su hijo como no se hallaba ensimismado quizas pensando un poema quizas en pensamientos mas descarados referentes a cierta mujer con perfume de anacardo. Hecho una furia al percatarse de que era ignorado Halford no tuvo mas opcion que la que ya llevaba dias meditando y aun colmado de tristeza por lo que iba a hacer dejo en la calle a Gwyn sin opcion alguna de volver. Vuelve cuando seas alguien de quien poder sentir orgullo, blandiendo espada por el imperio aprenderas. Gwyn casi llego al llanto cuando se decidio a no darles el obsequio de la suplica y marcho en un principio confiado y luego dubitativo al cuartel para un alistamiento que no le resultaba placido en absoluto.
