Laris Alieskienev

[Heaven 87]

• Nombre del Personaje
  Laris Alieskenev
• Raza
  Humano
• Sexo
  Hombre
• Edad
  32
• Altura
  1'90
• Peso
  97kg
• Lugar de Nacimiento
  Monasterio escarlata (Situado en Tierras de la Peste)
• Ocupación
  Luchador sacro
• Descripción Física

  Alto y robusto, siguiendo los genes norteños. Sus facciones angulosas y sus ojos negros intensifican su seria e inquisitiva mirada bajo sus seriosas cejas que permiten ver más allá del alma de cualquier persona. Tiene una herida en el ojo derecho que lo atraviesa en diagonal, parece cicatrizado pero solo hace que su cara se vea más "bonita". De su cuello cuelga una pequeña cruz dorada sujetada por una cadena de plata, la cruz adorna su amado tabardo carmesí que poco a poco se va descoloriendo tras cada lavado para quitar las manchas de sangre de sus enemigos paganos. 

• Aunque sus modales sean bruscos y pueda parecer alguien soez y vulgar, mantiene una higiene impecable. Trata de tener sus ropajes pulcros e inmaculados, al igual que su cuerpo. Quien lleva la bandera carmesí no puede permitirse tan mala imagen. Incluso, quien se acerque mucho a él, podrá percibir un agradable olor, a diferencia de mucha gente de Villadorada. 

• 

• (Imagen completamente normal representativa)

• Descripción Psíquica

  Tiende a ser impulsivo, guiado por sus sentimientos. Desde pequeño le enseñaron el camino de la luz por eso suele rehusar amistarse con personas que no compartan su misma ideología. Duro y serio, no teme a decir lo que piensa en cualquier sitio menos cuando hay autoridad, la ley ante todo. 

• Ficha Rápida
  No, pero en desarrollo.
• Historia

   

  • ¿Qué es la luz sin una espada que le haga honor?

   

   

  Laris Alieskienev, hijo de un abanderado escarlata caído en batalla. Curtido en los monasterios escarlatas como monaguillo a temprana edad.

   

  Desde pequeño el sacerdote Alfonsus le enseñó que era la luz y porqué había que adorarla, marcando así su obsesión con ella. Tambien, ante las traiciones, percibió una notoria cantidad de ejecucciones por parte de sus compañeros, tal era el numero que dejó de verlo como algo horrendo y espantoso, llegando incluso a cogerle el gusto.

   

  A los 18 años se casó con Adriana Vinfell, una campesina de una villa cercana al monasterio del que pertenecía. Teniendo así como heredero a un varón al que amaba casi tanto como la luz.

  Cuando su padre murió y corrió la noticia, no tardó en prepararse para servir a su bandera y sobretodo a la luz.

  Aunque no era muy hábil en combate, el monasterio siempre requería de soldados así que fue aceptado en las filas de los novicios escarlatas.

   

  Un día, a la vuelta de una expedición, corrió la voz de que la aldea cercana al monasterio donde se curtió fue atacada por no muertos siendo completamente arrasada. Presa de la colera de su interior, corrió a la aldea para encontrarse todo sumido en llamas y con ellas, su esposa e hijo.

   

  • ¿Y entonces? ¿Qué harás? *Espetó Alfonsus, en su habitación*

  • Soy... Laris Alieskienev, padre de un hijo asesinado, marido de una mujer asesinada ...Y alcanzaré mi venganza... En esta vida o en la otra.

Editado March 21, 2019 por Heaven

[Heaven 87]

 

Del cinto de Laris cuelga un especie de libro, no deja que nadie lo toque lo que hace que la curiosidad en la gente solo se acentué. Quien haya tenido la posibilidad de leer lo que guarda en su interior, podrá percatarse de las faltas de ortografía que hace. //Me duele hasta a mi hacer esas faltas. 

Día 1, 10:00AM, Villadorada: Escribo con el afín de que si algún día muero. Pueda enviar se estos registros a la crusada escarlata para que se sepa de mi muerte y de todos los actos que e hecho en su grandioso  glorioso nombre. Aunque este en proceso de aprender a leer, me veo capas de escrivir algunas palabras para describir mi día a día en el arrabal.  Hace tres horas que he llegado al apodado "arraval" de Villadorada. No esperaba menos, la podrehumbre y pobreza acechan este lugar que reniega a servir a la luz, y ese es el precio por tal fechoría. Mi primera tarea, despues de haber otrogado un rezo a la santa luz en el nombre de la cruzada escarlata ha sido una guardia en el hospicio. Las pobres gentes del arraval abundan hay y me temo de no ser capas de controlarlas.  Aunque no todo es malo, he conocido a un quinteto de críos que podrián ser, en un futuro, fieles seguidores de la luz. Su cabeza, Quartz parece ser el que más rehusa de nuestra orden pero eso no evitará que le enseñe el camino correcto. Querida, hija mía. Quiero decirós que no he dejado de pensar en vosotras y que no os olvidaré jamás, rezo cada día para que la luz os haiga dado un buen lecho donde dormir en el cielo.

[Heaven 87]

 

La puerta de una habitación se abre tras oir-se el "click" de las llaves al abrir la cerradura. Un hombre alto, robusto y armado entra a paso lento. Retira la silla de una mesilla de noche y a luz de vela se dispone a escribir, mojando en tinta oscura como la noche una pluma que saca de un paquetito. 

 

Día 3, 10:00 AM, Villadorada: No he podido escrivir. No, no he podido. He estado demasiado liado con mis quehaceres ahora que estoy en el arrabal. Porfin e mantenido mi primer contacto con un hermano de la escarlata, Arthur Render. Por su puesto que ya había conbersado con algunos miembros de la gloriosa llama carmesí en el hospicio y la catedral pero... Arthur no parecia alguien que se estubiera dia y noche en el hospicio. Parecía un hombre de acción. *Una rayada de tinta oscura y varias gotitas manchan la hoja, Laris cambia de línea.*  No puedo dormir bien. El tema de los herejes, saber que las gentes del arrabal corren tal peligro día y noxe  noche me quita el sueño... Mañana hablaré con Quartz y su grupo para que brinden ayuda al hospicio. Con suerte nos dirán una localización o una persona a quien apodarse...  Querida, hija mía. No he dejado de pensar en vosotras en ningún momento, liberaré barrios bajos de el mal que la acecha, lo haré por vosotras, lo haré por la luz. Os quiere, Laris.