Garlack Grito de guerra

[Kario 535]

• Nombre: Garlack Grito de guerra
• Raza: Orco
• Sexo: Hombre
• Edad: 28
• Altura: 2,15
• Peso: 123
• Lugar de Nacimiento: En algún lugar de Draenor
• Ocupación: Aprendiz de herrero-Guerrero
• Historia rápida

 

Descripción física:

Garlack es un orco que destaca sobre los demás de su raza por su gran físico. Desde que era pequeño siempre ha realizado tareas físicas, siempre ha trabajado los músculos y finalmente ha desarrollado una gran musculatura.

Es un orco muy alto (2,15 cm) y muy robusto (123 kg). En su aspecto muestra su fiereza, tiene varias cicatrices por el cuerpo, pero la más grande la tiene en el hombro derecho.

Tiene la piel de color verde oscuro, junto con una gran barba y pelo recogido. Sus ojos muestran un color rojizo.

 

 

Descripción psíquica:

Garlack es un orco que valora la fuerza por encima de todo. Si posees fuerza, tienes honor. Por ello no confía en la magia en cualquiera de sus escuelas, exceptuando a los chamanes, en estos si que confía y respeta. A pesar de todo, es un orco noble con sus camaradas de batalla y no abandonaría a ninguno a su suerte.

Por tanto, Garlack considera sus camaradas de batallas aquellos que poseen fuerza y por tanto honor.

Suele ser silencioso y no muy hablador. No tiene piedad por nadie, ni por el mismo. Le encanta la batalla y ver como la sangre cae del cuerpo de su enemigo. Cuando tiene tiempo libre, lo pasa ejercitando los músculos. Siente admiración por la forja de armas y armaduras.

No confía en los renegados, ni en los elfos.

 

 

Historia

 

Fuego, sangre, hachas, guerras...todo ello es lo que piensa Garlack, un orco violento, sanguinario, sin piedad, no siente lástima por nada ni nadie. Nunca fue un orco que destacara por su sabiduría o su inteligencia, mas bien al contrario. 

Desde pequeño siempre destaco por su gran físico, nunca fue muy inteligente de hecho tuvo grandes dificultades para aprender a hablar con los demás. Incluso aprendió a pegar puñetazos antes de decir alguna palabra. Por suerte para él había nacido en el clan perfecto, Grito de guerra.

Garlack apenas recuerda a sus padres, solo lo que le han contado algunos miembros del clan. Los cuales dicen que murieron luchando por el clan, algo que llenaba de orgullo y honor a Garlack. Siempre había estado solo, pero para él no era gran problema. Aunque debido a esto se había convertido en un orco poco hablador y bastante silencioso, normalmente siempre se metía en conflictos con otros orcos, acabando en peleas.

Llegada la edad, llegó el Om'riggor, llegó el día de convertirse en adulto. Garlack se había entrenado para ello, estaba preparado y así lo demostró. Un chamán del clan marcó a un viejo Talbuk, el cual Garlack debía darle caza y bañarse con su sangre para recibir la bendición de los ancestros y posteriormente llevar el cuerpo al clan.

Garlack en seguida partió, solo, con una gran hacha a su espalda y sin apenas provisiones. Tardó tres largos días en darle caza a la bestia, cuando regresó al clan todos los orcos rugían y aplaudían, Garlack había pasado la prueba. Cubierto de sangre seca, dejo al animal en el suelo, frente al chamán. Garlak se había convertido en un orco adulto.

Aún así no fue tan sencillo, esta caza le costo una buena herida en el hombro derecho, el cual casi lo pierde y posteriormente con el paso de algunos años se le quedaría una buena cicatriz.

A pesar de todo Garlack seguía entrenando su físico, seguía igual de violento que cuando era pequeño, lo que le llevo a varias peleas y en la mayoría de los casos siempre era en inferioridad numérica lo que provocaba que sufriera algunas palizas y quedase mal herido. Pero esto no le importaba, era una simple motivación para seguir mejorando. Garlack era violencia pura.

Garlack seguía igual, si seguía así, duraría poco, acabaría muerto en algún Mak'Gora o desterrado por ser demasiado violento. Garlack era un problema. Pero un viejo orco herrero llamado Rog'mar, se dio cuenta y decidió enseñar al violento orco su oficio, e intentar canalizar algo de su violencia en el martillo para forjar armas y armaduras.

No fue una tarea fácil, Garlack afirmaba ante Rog'mar que no tenia fuerza, no tenia el suficiente honor como para ponerse bajo su mando. Así pues, el viejo orco lo retó a un Mak'Gora. Fue un Mak'Gora sin testigos, una lucha sin armaduras, sin armas, solo con puños. El viejo orco no poseía el privilegiado físico de Garlack, y pronto recibiría un par de puñetazos en la cara. Garlack rugía y seguía golpeando al viejo orco. Pero este viejo orco tenía mucha más experiencia que Garlack y pronto se lo quitaría de encima con unos hábiles movimientos, se lanzó sobre el joven orco, dándole unos grandes golpes sobre el cráneo, dejándolo inconsciente.

Tras despertar Garlack se sintió decepcionado consigo mismo y el viejo orco lo animó y le intento inculcar el oficio de la herrería, como forjar, hachas, armaduras...

A Garlack le costaba, se le hacia difícil, pero poco a poco y con paciencia comenzó a forjar armas, pasó el tiempo y fue mejorando. Pero seguía siendo un aprendiz. 

Rog'mar intento a educar un poco a Garlack, le mostró como comportarse...a veces no con mucho éxito, pero Garlak mejoró un poco su comportamiento y aprendió a controlar algo su violencia, ya no se metía en tantas peleas. Quizá era porque el trabajo en la fragua era demasiado cansado y se quedaba sin energías. 

Al cabo de un tiempo, ya con la unificación de los clanes y bajo el mandato de Garrosh Grito de guerra. El viejo orco enfermó y Garlack sabía que Rog'mar no viviría más tiempo y así fue, al cabo de unas semanas falleció. Garlack orgulloso por todo lo que le había enseñado el viejo orco, se pertrechó con equipo, provisiones y con un hacha forjada por Rog'mar.

Había llegado la hora, en la que Garlack, sirviese a su clan, a su pueblo, a la Horda. Lo mejor que sabía hacer era combatir, así que pensó que su primera opción podría ser el ejercito...

Editado March 27, 2017 por Kario