Nombre: William Herrera
Raza: Humano
Sexo: Hombre
Edad: 19
Altura: 169cm
Peso: 68
Lugar de Nacimiento: Villanorte
Ocupación: Guarda de caravanas
Historia rápida
Descripción física:
William es un joven de estatura y peso medios, equilibrado y no muy fuerte físicamente, pero con buena planta, muy rápido en sus movimientos, lo que le facilita su trabajo como guarda.
Descripción psíquica:
Generalmente William es un hombre amable y feliz, sin embargo, suele enfadarse con cierta facilidad, y no perdona fácilmente, es muy rencoroso.
Historia
William nació en villanorte, y pasó su infancia junto a su primo, Nicholas Stevenson con el que jugaba y al que acompañaba en sus trabajos como leñador mientras se entrenaba con una espada de madera que le hizo su tío, el padre de Nicholas.
Desde bien pequeño ha sido un chico más bien ágil, solía esconderse entre los arbustos y tras los árboles para asustarlo cuando menos se lo esperaba, era su forma de jugar.
También guardaba mucho cariño al joven Klaus Stevenson, el hermano pequeño de Nicholas, con el que jugaba también, especialmente tras la muerte de su tío, cuando Nicholas tuvo que ejercer de cabeza de familia.
A sus 16 años, William partió con una propuesta de trabajo, para ser el guarda de unas caravanas de comerciantes que salían desde villadorada buscando nuevas rutas comerciales, partió junto con la madre de Nicholas y Klaus, y les aseguró a estos que protegería a su tía con su propia vida.
Tras cumplir 19 años, William aún se encontraba viajando junto con las caravanas de comercio, cuando al llegar a un pequeño poblado, le llegó la noticia de que un noble había sido asesinado en su propia casa, un noble, que al parecer vivía en una casa de una maestra muy reputada del lugar, conocida como May. William no tardó en darse cuenta del parentesco que guardaba con May, la maestra, y pensó que el noble asesinado, bien podría ser alguien de su propia familia, así que se despidió de los comerciantes, que tuvieron que buscar un nuevo guarda, y, con el dinero ahorrado tras sus 3 años guardando las caravanas, compró un caballo y partió raudo a Villadorada, a buscar a sus primos más allegados, y deseando que ninguno de ellos fuera el asesinado.
