Con la partida del escuadrón de veinte hombres y mujeres, se esperaba una lucha fácil y sencilla, con heridos, pero eran solo diez no-muertos, no podía ser tan complicado, pero la presencia de una figura de negra armadura frustó la formación de los escarlatas, descolocandolos y haciendo que estuviesen en desventaja, y por ello, la batalla fue un caos, bajas en ambos bandos, aunque eran 1 a 2, los no-muertos pudieron acabar con gran parte de los soldados de la llama roja, pero gracias a las sanaciones y la habilidad de los guerreros y el sargento, pudieron acabar con gran grueso de las caballería no-muerta, más no pudieron matar a dos de los soldados restantes que huyeron junto al hombre de negra armadura.
Si bien la "Camarilla" había sido parada, volvería, o eso parecía por las acciones del caballero negro.