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Roleros Destacados


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Showing content with the highest reputation on 19/07/19 en todas las áreas

  1. 5 points
    Ahora le toca a @Prototaip sufrir me bullying en forma de meme
  2. 5 points
    El Manuscrito del Obispo Jeremias de Lordaeron Kingsley se encontraba enseñándole a Ifán toda la belleza que Nuevo Avalon guardaba, mostrandole cuales eran los mejores comercios, que vendedores eran más de fiar, de cuales debía de tener cuidado si no quería pagar un precio excesivo por unas pocas frutas, cuando Emelina llegó a la carrera tras ellos, el Capellan Barbejo le había hecho llamar de manera inmediata. Cuando el grupo llegó hasta el descubrió lo que ocurría, al parecer, un antiguo Manuscrito que pertenecía a la iglesia, los Manuscritos sobre la Luz del Obispo Jeremias de Lordaeron, habían sido robados e intercambiados por una falsificación de mucha calidad. Solo gracias a un desafortunado accidente, el padre Mutton se dio cuenta del engaño, pues una pequeña mancha que el mismo había dejado hace un par de meses en el tomo por un descuido, había desaparecido inmediatamente, eso levantó las alarmas y se sometió el texto a un estudió intensivo que termino con una conclusión certera, en efecto, era una falsificación. Barbejo sospechaba del Novicio Thorne, con el que tenía una relación muy poco agradable debido a los problemas que este causó durante su primer año de aprendizaje en el lugar. A su vez, el novicio había sido el encargado de transportar el valioso texto al ayuntamiento de Nuevo Avalon, pues para reuniones importantes se exibia el manuscrito, así como otras reliquias, en señal de respeto y de prosperidad. Barbejo pensaba que Kingsley tenía algo que ver, o era cómplice, o era un inepto que no se había dado cuenta de un cambió que, de seguro, hubo de ocurrir delante de sus narices, y dejó mas que claro que de no resolverse el asunto, las consecuencias serían desastrosas para el hombre. Ifán y Emelina se ofrecieron a ayudar al hombre con su problema, pero.. ¿Por donde empezar? Kingsley se quedó en la iglesia, revisando los registros de quien había tenido acceso al manuscrito para investigar, mientras que les facilitó a la pareja un contacto con el que podían hablar en el ayuntamiento para tratar de discernir si había ocurrido algo en el lugar. Allí fueron, y allí hablaron con Sofía. La mujer se mostró amistosa con ellos, pero no parecía saber nada al respecto, y les mandó a hablar con el encargado de manipular objetos tan valiosos, el Señor Benjen, más este se encontraba enfermo y hacía casi una semana que no acudía a trabajar, con un permiso vacacional de un par de semanas más, y lamentandolo, no conocía el lugar de su hogar, sin embargo les indicó donde se encontraba una taberna regentada por su hermano, que tal vez podría ayudarles mejor. Al llegar se encontraron con una gran fiesta, habíahasta un bardo tocando para ellos. Descubrieron que al parecer, si gritabas en la barra, "Por Rosby!" la ronda, la pagaba el susodicho. Poco descubrieron sobre el tal "Rosby", `pues estaban más interesados en conocer donde residía Benjen, solo supieron que se trataba de alguien joven, relativamente nuevo en la zona, y que al parecer, había conseguido una gran cantidad de dinero de repente a causa de una herencia que su difunta abuela le había dejado en exclusiva. Tras enfrentarse a los problemas que uno puede encontrarse en un lugar donde el alcohol corre como rios, lleno de gente borracha y ruido, consiguieron lo que habían ido a buscar, sin embargo la noche empezaba a caer, decidieron regresar a la iglesia, informar a Kingsley de lo que habían descubierto e ir a visitar a Benjen al día siguiente. Información of-rol: Consecuencias: -Sofía ha mostrado un especial interés en Ifán, y espera verle el día siguiente al medio día. -El grupo conoce la ubicación aproximada de la casa de Benjen. -No se tiene apenas información sobre "Rosby". -Emelina tendrá resaca al dia siguiente Participantes y habilidades usadas: Toda la sesión ha sido completamente interpretativa. Kingsley ( @Thala) Tradición/Historia Emelina ( @Psique) Tradición/Historia, Leyes Ifán ( @Prototaip) Tradición/Historia, Leyes
  3. 2 points
    Traición a la Luz -Tienes razón, son demasiadas coincidencias- Susurraba Elegost a Santiago, mientras vigilaban a Edric, Nadia y Badin en la vieja y derruida torre vigía. El plan estaba trazado. Elegost acabaría rápidamente con Nadia con la ballesta prestada, y en el caos Santiago arrojaría la criatura venenosa a la cara de Edric. Era un plan, nadie dijo que fuese un plan inteligente. Elegost no tenía experiencia con las ballestas, y el virote acabó pasando por al lado de Nadia. Al menos, con el caos desatado por tener un atacante misterioso Santiago había logrado dar con el animal en la cara a Edric, pero entonces el enano les vio. Cuando Elegost quiso acordar, Santiago ya estaba huyendo y le había dejado atrás. Pronto las cosas se fueron de las manos, y el grupo acabó reduciendo a Elegost frente a la empalizada de Husen, en donde uno de los vigías se reía del gracioso espectáculo que habían dado. A Elegost solo le faltaba sueño. Por suerte, se lo habían dado al fin. Ya volvería a despertar, y comenzarían las preguntas... // Tercer rol sobre la búsqueda de la Zapatilla de Lordain, sobre el camino a la misteriosa aldea de Husen y sobre traiciones inesperadas (Sin dudas, de parte de esos tres malhechores) Participantes: @Stannis the Mannis como Elegost. Habilidades usadas: Sigilo, Atletismo, Ballesta ligera, Reflejos, Defensa, Desarmado ofensivo @Curly como Nadia. Habilidades usadas: Reflejos, Escalar, Atletismo, Arco, Desarmado, Defensa, Advertir/Notar @Bastián como Balin. Habilidades usadas: Reflejos, Escalar, Atletismo, Advertir/Notar, Hacha, Defensa, Desarmado @SwordsMaster como Edric. Habilidades usadas: Reflejos, Escalar, Atletismo, Advertir/Notar, Defensa, Pala Vigía 2 como Vigía 2. Habilidades usadas: Partirse de la risa
  4. 2 points
  5. 2 points
  6. 1 point
    Hay que llenarse de Fe El plan había sido puesto en marcha. Por primera vez, una compañía protegida por la mismísima Luz, liderada por el Protegido en persona en su santa misión, se enfrentaba ante lo increíble e inesperado: Una de las auténticas, puras, bellas y extravagantes ideas de Elegost a las cuales mucha gente se había enfrentado ya en el pasado, con resultados tan variables como la sanidad detrás de las propias ideas. El resto de la Compañía de la Zapatilla, como Balin, Elegost y Edric habían acordado llamarla, lejos de amedrantarse ante la idea de arriesgarse en busca de una sucia y vieja zapatilla, se sumó de buen gusto al viaje, ya fuese por sus propios motivos de gloria, fortuna o auténtico deseo de ayudar a la Iglesia, pues nada pasaba por ver qué si la Luz tendría piedad con sus buscadores. Quien sabe, quizás volverían bañados en oro y reconocimiento por la recuperación de tan primordial reliquia o, en el peor de los casos, al menos lo habrían intentado y recibirían unas palmaditas en la espalda si sobrevivían. En cualquier caso, todos habían aceptado ir. Y ya reunida la pequeña Compañía en el pueblo de Riflehondo, se abastecieron de suministros para el viaje y abandonaron el pueblo, para adentrarse en los Bosques de Adair. El valor de la Zapatilla estaba desperdiciada tirada en un pueblo roñoso y deshabitado. La Compañía de la Zapatilla iba a cambiar eso. Solo una cosa estaba clara: Si Elegost no podía ir a por su Zapatilla por el sur de la provincia, entonces abriría su propio camino en el bosque a través de todos los peligros que hiciera falta. // Rol introductorio para la búsqueda de la Zapatilla de Lordain. Horario para continuar a determinarse, ya que debo intentar que no me coincida con nada en la Corte de los Mendigos. Pero si no puedo, que le den a Jasón, esto es más importante. Es la Zapatilla. Habilidades usadas: Elegost/El Protegido: Supervivencia, Advertir/Notar, Rastrear, Rumores Nadia: Comercio, Advertir/Notar Edric: Religión, Advertir/Notar, Rumores Balin: Advertir/Notar (lo siento no va lo de etiquetar gente)
  7. 1 point
  8. 1 point
    Necesito ayuda, no puedo parar con los memes
  9. 1 point
    Conociendo los alrededores Elegost y su grupo había acomodado una pequeña cabaña abandonada para pasar la noche. Con apenas complicaciones, habían logrado hacer un rodeo a los enemigos de esta aventura, los Wendigos asentados en las ruinas de Roblehondo y un puesto de avanzada Renegado cuando salieron de las fauces del Bosque de Adair, sin entrar en ningún conflicto ni ocasionar mayores agresiones. Una serpiente intentó morder a Balin, y lo logró, más su veneno resultó inefectivo sobre la resistencia nata del enano, pues ninguna serpientucha humana podría hacer ceder a un enano. Quizás Elegost, con un humor bastante más gris y agotado que al iniciar, no viese aquello como una victoria... Más, sin duda, lo había sido. Una victoria incluso más grande que la de aquellos que obran el mal. Ya estaba cerca de la Zapatilla. // Segundo rol de la búsqueda de la Zapatilla de Lordain, sobre el trayecto para salir del Bosque de Adair. Participantes: @Stannis the Mannis como Elegost. Habilidades usadas: Supervivencia, Advertir/Notar, Fauna, Atletismo, Crear Luz (Luz, Dificultad 12) @Curly como Nadia. Habilidades usadas: Advertir/Notar, Atletismo @Bastián como Balón. Habilidades usadas: Fauna, Advertir/Notar, Atletismo, Desarmado @SwordsMaster como Edric. Habilidades usadas: Advertir/Notar, Atletismo
  10. 1 point
    X. Aquí Fuimos Reyes Alguna Vez El viaje no había resultado apacible durante los siguientes días para la caravana. Recorrían las montañas guiados por la memoria de Grundulf, liderados por la voluntad de Odriel Feathersun y solo consolados por los cabecillas humanos Rodrig y Godfrey. Atravesaban caminos estrechos y luchaban para evitar ser tragados por la nieve, se encontraban cadáveres de la Compañía de Bodvar en el camino y cada vez eran menos, semienterrados en una tumba de nieve que pronto acabaría por sepultarlos. Luchaban contra ventiscas y se arriesgaban en peligrosos descensos por barrancos y desfiladeros. La promesa de una tierra verde mantenía los espíritus lo suficientemente avivados como para continuar con esta pesadilla. Al fin y al cabo, ya se habían metido de cabeza en ello. Era la primera vez que se alejaban tanto de sus ya destrozadas murallas. Era la primera vez que caminaban sin un rumbo en específico. Solo guiados por la necesidad de encontrar un nuevo hogar o morir en el intento. Era una existencia miserable, para gente miserable. Algo extrañamente normal solo en sitios como este. Las familias se mantenían siempre con la frente en alto, no obstante. Al fin y al cabo viajaban en su tierra y lo hacían con una facilidad natural. Estaban acostumbrados a vivir de esta forma. En el camino conocieron muchos lugares de curioso origen, el enano y algún hombre o mujer lo suficientemente viejo para recordar daban explicaciones y contaban historias de sitios como La Caída de Grokk, el barranco donde un earl enano acabó con la vida de un jefe de guerra orco. O la Piedra Tallada de Heimzbrindal, una roca gigante y repleta de escritos, símbolos y pinturas que representaban el trabajo de Heimzbrindal el Escultor de Cuentos. Un famoso centro de peregrinaje. Finalmente habían iniciado el descenso entre las montañas, Grundulf decía que estaban a menos de un par de días de entrar al boscoso valle si seguían al ritmo que iban, la exhausta caravana no podía seguirle los pies a los incansables enanos, ni elfos ni humanos tenían más energías para continuar el viaje. La petición de descanso fue aceptada rápidamente, y los que se negaban fueron rápidamente callados con miradas furtivas. Godfrey se arropaba entre las pieles intentando dormir, se habían hallado un sitio en una cueva bajo la nevisca y por suerte todos cabían dentro algo apretujados pero cálidos al menos. Ahí, solo alumbrado por las tímidas llamas de una hoguera pequeña Godfrey guardaba un fuerte resentimiento hacia el hechicero quien para él solo presagiaba la muerte de todos. ¿Por qué debían seguirlos después de todo lo que les habían hecho pasar? Esa pregunta revoloteaba sobre la cabeza del humano todas las noches antes de dormir. Dormir bajo el arrullo de vientos fuertes y relámpagos feroces. Su abuelo había guiado a su gente a un sitio seguro en las montañas, los organizó y los convirtió en una comunidad que podía valerse por sí misma en los despiadados picos nevados. Los alteraci eran fuertes gracias a su vida austera, de eso no había duda, pero igual que fuertes habían muchos que eran débiles. Esos que la nieve enterraba fácilmente con el tiempo. Su padre era uno de ellos, y aunque Godfrey no lo odiase por eso ciertamente odiaba lo que hacia pensar a la gente de él. Que era débil al igual que aquel fracaso. Con el fallecimiento de su abuelo Sigis el mando recayó sobre él, y la gente de Sigisburg le seguía a él ahora. La última promesa que le dio a su abuelo era la de cuidar de todos ellos como si fuesen su familia. Y en parte, lo eran. Aquellas personas eran todo lo que tenía, todo lo que aspiraba a tener y por lo que valía la pena luchar. Su vida se basaba en mantener a salvo las vidas del resto... Aprendió desde muy joven a ser el líder que su abuelo necesitaba para el futuro pero cuyas expectativas nadie alcanzó, ni siquiera el propio Godfrey se podía comparar a Sigis. Sería un insulto en sí mismo el hacerlo. Pero ahí estaba, intentando dar lo mejor por su promesa, para él eso era lo más importante. Debía asegurarse de que esa gente sobreviviese. Rodrig resultó ser un aliado útil en esto último, el experimentado cazador tenía el contacto que a el le faltaba con las familias de Sigisburg, y su conocimiento para sobrevivir les aseguró muchos días de vida a todos sus compañeros. En parte eso le dio una posición de liderazgo entre todos ahí, y aunque el solitario cazador prefiriese mantenerse alejado, siempre volvía para atender las necesidades de su gente. Se convirtió en su compañero indispensable a la hora de preparar a la gente para repeler un ataque, esconderse en los caminos y sobrevivir en la intemperie. Además de un amigo cercano. Muchas noches pasaron contando historias de tiempos pasados. Tiempos que todos esperaban con añoranza pero sabían que nunca volverían. Tiempos mejores que estos, reales o no, sin ninguna duda. Una frase se repetía en su mente cada vez que los recuerdos de aquellas historias regresaban: "Aquí fuimos reyes alguna vez." Con la llegada del elfo y su caravana solo desgracias y muerte habían llegado a sus vidas; no siendo suficiente con el ataque de los orcos aquel desgraciado había venido para ir rematándolos a todos uno a uno con su viaje suicida. El orden que tanto se había preocupado en proteger había sido resquebrajado en cuestión de días, y pronto no quedaría nada para ellos. No pensaba permitirlo. Una vez este viaje terminara, retomaría el mando de su gente como debe ser. Aunque sea cortando la garganta del maldito demonio de orejas picudas. Su gente viviría, y el sueño de su abuelo viviría a través de ellos. XI. "Kaunan" Con cada paso que daba Balin, la tierra se hacía menos blanca. Eso era un alivio, significaba que estaban cerca del valle. Habían dejado de colgar de sogas y por fin usaban sus pies para descender por un paso entre las colinas. El rastro de la Compañía de Bodvar se había perdido con la desaparición de la nieve, pero la esperanza de conseguir el refugio prometido ahora era palpable. La caravana tenía ánimos renovados y estaban dispuestos a continuar. Ni siquiera querían pararse a descansar pasadas unas horas de descenso, parecía una escalinata hecha para gigantes por la que se bajaba en forma de Z, llegando a una punta y bajando hasta la otra, y a lo lejos se podía ver un océano de árboles. Esto, por alguna extraña razón fue tan bien recibido por los humanos que se habían puesto a cantar y reír. Balin se alegraba por aquello, en parte. No tenía idea de cuantas penurias habían pasado aquellas familias hasta este primer momento de felicidad en todo el viaje. La tierra verde ya no era una promesa, si no una realidad. Estaba frente a ellos esperando a que la visitasen por fin. Grundulf no paraba de hablar acerca de la ciudad-fortaleza de los enanos que habitaban el valle, una mirada aprobatoria de Odriel le confesó a Balin que por fin encontrarían a Bodvar y al resto de la compañía. El enano apostaba todo a que el guerrero Drakkigson les esperaba en la ciudad-fortín con un buen número de guerreros contratados. El sol brillaba fuertemente en aquel momento, después de días descendiendo con dificultad y noches heladas bajo el acoso de la gran tormenta finalmente las cosas parecían tornarse a favor de la caravana. Tras unas cuantas horas de descenso tranquilo, la caravana llegó a uno de los riscos de la colina donde una cascada y un lago rodeados de grandes rócas repletas de musgo sirvieron como el punto de descanso perfecto para los aun entusiasmados miembros de la caravana. Las familias aunque estaban cansadas todavía deseaban continuar descendiendo. Balin se sorprendía cada vez más con el espíritu de los humanos. Al final decidieron montar un pequeño campamento ahí, pues las altas rocas les brindaban escondite contra cualquier visita no deseada y el agua estaba limpia con algún que otro pez paseando en ella. Ahí pasarían la noche, y mientras la caravana descansaba Odriel, Grundulf, Rodrig y Balin decidieron ponerse a explorar los alrededores en busca de algún enemigo. En el trayecto, el grupo se encontró con unas extrañas ruinas al aire libre en un punto alto de la colina. El suelo estaba hecho de piedra cubierta de musgo y habían dos pilares invadidos por la vegetación. La cual era abundante en el lugar. Se podía ver el atardecer a lo lejos, y un mar de altos árboles. De hecho, se tenía una hermosa vista de toda la región desde donde estaban; una gran cordillera con rocas tan altas como casas, un enorme río y a lo lejos una ciudad que tenía el tamaño de un guijarro desde donde ellos estaban. Pero fue suficiente para llenarlos de expectativas. ¡Ahí estaba la ciudad de los enanos que tanto habían estado buscando! Pronto Grundulf y Balin reconocieron este sitio como uno erigido por su raza, pero no estaban seguros de su naturaleza. Rodrig y Odriel investigaban por su lado, pero no podían descubrir cosas al ritmo de los curiosos enanos. Pasado un rato Rodrig descubrió que había algo detrás de las enredaderas y sábanas de hojas que cubrían el pilar completo. Runas enanas estaban escritas en la superficie rocosa, cubriendo hasta el último centímetro de la estructura. Grundulf reconoció estas runas como unas muy antiguas que carecían de poder en específico, pero servían para dar un mensaje. "Aquí descansan los restos de Dran Vagrison el Humilde, que su espíritu ronde tan libremente como su cuerpo lo hizo en vida, que este sea su punto de encuentro en el más allá hasta el fin de nuestra historia" El mensaje grabado dejó en claro que aquel sitio era una tumba, pero además de ese se hallaba uno más pequeño escrito en el suelo. Tanto Rodrig como Odriel sugirieron retirarse del lugar, ya que no había nada de interés ahí. Pero los curiosos enanos lograron encontrar algo más en aquel sitio de reposo. "¿Qué es cómo un enano pero con el tamaño de una montaña?" El misterioso mensaje se hallaba en una baldosa cubierta de enredaderas y musgo, causando gran consternación en el grupo de exploradores. Estaba acompañado por una runa que Grundulf reconoció por pura superstición como mágica. La runa de la invisibilidad y la suerte, Kaunan. Algo más había en aquel sitio que ellos no veían todavía. Era normal que los enanos crearan mensajes ocultos en las edificaciones para algún uso en específico, como desorientar al enemigo o enseñar las instrucciones para operar mecanismos ocultos. Este sin dudas se trataba de un acertijo el cual los aventureros tardaron unas cuantas horas en descubrir, de no ser por una maldición que soltó Rodrig por casualidad, no lo habrían adivinado jamás. Repentinamente, unas rocas empezaron a caer bajo un suelo hueco, y al acercarse al agujero el grupo descubrió que en el interior se hallaba un sarcófago cerrado con un casco encima de él. Los enanos se miraron y luego observaron el casco, en aquel sitio era obvio que corrían energías mágicas y Odriel lo había mencionado. Quizás la opción más sabia era dejar la tumba así como estaba, pero si aquel sitio estaba ahí era para ser descubierto y seguramente tenía algo que ver con aquel casco que en la cresta tenía grabada la runa de la suerte. Balin tomó el casco y el nombre de la runa salió solo de sus labios. El grupo finalmente se retiró, pues ya el ocaso se había convertido en anochecer y seguramente el campamento ya estaría montado. Balin observaba el casco de Dran mientras caminaba, al final del grupo. Y se volteó para mirar por encima del hombro la tumba una última vez. Para su sorpresa, el sitio había vuelto a como estaba antes: Las enredaderas habían vuelto a cubrir los pilares y la vegetación apareció en lugares donde ellos la habían removido. La tumba estaba a salvo de saqueadores y oculta al ojo impreciso una vez más. El rostro sorprendido del enano se convirtió en uno alegre. Con una media sonrisa el enano se volteó por completo y saludó a Dran Vagrison el Humilde una última vez antes de retirarse. Estaba seguro de que su espíritu le acompañaría a partir de ahora. Solo esperaba que tuviera algo de sabiduría que compartir con el viejo enano. Participantes / Habilidades usadas: Odriel Feathersun @ILUSDN // Advertir/Notar - Tradición/Historia - Supervivencia - Escalar Balin de Loch Modan @Bastián // Advertir/Notar - Tradición/Historia - Hacha de mano - Supervivencia - Escalar Bodvar @Axl // Reflejos - Martillo de mano - Supervivencia // Trama y trabajos largos en desarrollo, para participar enviar un mensaje directo por foro o Discord // 4/4/19,4:00h de duración //¡Estamos de vuelta!
  11. 1 point
    By Amu-Art: https://twitter.com/AmuShaows
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