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diacono17

Drakar

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  • Nombre: Drakar de los lobo gélido
  • Raza: Orco
  • Sexo: Hombre
  • Edad: 21
  • Altura: 2.15
  • Peso: 190
  • Lugar de Nacimiento: Reinos del este-campo de concentración
  • Ocupación: Criador de huargos
  • Historia completa

 

Descripción física:

Drakar es un orco fuerte y de musculatura notoria por su formación en el combate y una vida de trabajo físico, sus colmillos son medianos, ojos de tonalidad amarilla, mirada fiera y expresión seria, tiene pendientes en las orejas y cabello largo negro, su piel es de tonalidad verde oscura algo opaca, viste con pieles de cuero y lleva dos hachas de una mano.

 

 

Descripción psíquica:

Drakar solo expresa su opinión cuando es necesario y se requiere, no se desgasta en palabrería, a pesar de ser un orco es de temperamento calmado y solo combate cuando es necesario, aunque si lo hacen perder la paciencia su hacha hablara por él, mantiene buenas relaciones con las razas aliadas y con los seres de la naturaleza.

 

 

 

Historia

 

Dragar y Egrall, orcos del clan Lobogelido, marchaban por las tierras del norte de Azeroth para encontrar un refugio luego de hacerse a un lado y negarse a participar en aquella matanza que la antigua horda había dirigido sobre Azeroth. En aquel viaje desconocido y peligroso por tierras que los consideraban enemigos mortales, avanzaban decididos y llenos de valor, algo natural en los orcos, sin esperarlo la pareja de orcos fue descubierta por soldados humanos del norte y puestos en cautiverio en campos de concentración para los orcos capturados. En aquella condena la pareja de orcos tuvo a un hijo al que llamarían Drakar, uno de los primeros entre muchos otros niños orcos que nacerían en ese nuevo planeta, su nuevo hogar, aunque sonara irónico.

10 años pasaron desde aquella cruel guerra que se desato sobre Azeroth y los reinos humanos, Drakar aún era un niño, pero los duros tratos de los humanos hacia los orcos capturados en aquel lugar, lo hicieron asumir la vida con dureza desde su niñez, aunque para un orco esto no era algo nuevo. De sus padres, Drakar aprendió su idioma, y gran parte de su herencia como orco, en los momentos en que no hacían trabajar a sus padres, podían convivir como familia y escuchar sus historias sobre Draenor, su cultura, sus especies, los huargos que eran sus compañeros y sus hermanos del clan, con los cuales alguna vez fueron felices, antes de que la corrupción demoniaca tocara sus vidas y cambiara todo, hasta el color de su piel.

Los padres de Drakar habían aceptado con tristeza su terrible destino, cada día que pasaba perdían cada vez más las esperanzas de poder ser libres, pero Drakar no, siempre se imaginaba en las tierras que sus padres le describían, corriendo con un huargo amigo y apreciando lo natural como un regalo de sus ancestros y hermanos. Un día paso lo que creían imposible, orcos que habían estado escondidos en aquellas montañas del norte habían aparecido ahora guiados por un joven orco llamado Trall, el cual había escapado de un campo de concentración y ahora estaban liberando a todos los orcos cautivos bajo el estandarte de una nueva horda; el campo de concentración donde se encontraba Drakar y sus padres no tardó en ser ataco por los orcos y liberando a todos sus hermanos que se encontraban allí, incluyendo a Drakar y su familia.

Ahora libres, con un destino incierto, pero guiados de la mano de un nuevo líder, decidieron que en aquellos reinos no tendrían ningún futuro, aquel nuevo líder, los guio a encontrar su lugar atravesando el océano, los orcos se dirigieron a cruzar el Mare Magnun con la esperanza de encontrar un lugar al cual podrían llamar hogar; robaron barcos de los humanos y emprendieron su camino a su nuevo destino. En uno de esos barcos iban Drakar y sus padres, temerosos por lo desconocido, pero confiando en que encontrarían por fin su destino. Varias semanas pasaron en alta mar, el barco en el que iba Drakar y su familia se separó del resto de barcos durante el viaje, temiendo lo peor y pensando que nunca llegarían con vida a tierra firme, sucedió el milagro, lograron divisar tierra y desembarcar en lo que sería en un futuro las costas de Durotar. Aquella familia de orcos junto con los demás hermanos de raza que venían en aquel barco, tomaron lo poco que tenían, algunas partes del barco y tierras más arriba lograron construir un pequeño campamento mientras lograban reunirse con los demás orcos que aún permanecían en altamar.

En aquel campamento improvisado, Drakar, sus padres y sus compatriotas se fueron adaptando conforme pasaron los días, comenzaron a explorar sin alejarse mucho, con la esperanza de encontrar a los demás orcos que partieron junto a ellos de los reinos del este, mientras esto pasaba, comenzaron a cazar e identificar las especies nativas de aquellas zonas, en algunas ocasiones tuvieron enfrentamientos con unos seres a los cuales llamaron hombres perros, pero viéndose superados en número prefirieron retroceder y esperar reunirse con los demás orcos que aún no aparecían desde que subieron a aquellos barcos en busca de su destino.

Paso un tiempo y cuando imaginaban que habían quedado solos en aquel nuevo lugar desconocido para ellos, pudieron encontrarse de manera sorpresiva con los demás orcos, incluyendo a aquel llamado Trall que los lideraba y caminaba ahora al lado de otras razas, los cuales serían sus aliados en su nuevo hogar. Trall los guio hasta el lugar donde fundarían su nueva ciudad, en el cual se establecerían y llamarían Orgrimmar, en aquella nueva tierra que llevaría por nombre Durotar, en honor al padre de Trall llamado Durotan. Pasaron los años y el padre de Drakar lo fue formando y guiando cada día en el arte de la guerra, paso por paso fue aprendiendo como manejar un hacha y asestar golpes que pudieran acabar con sus enemigos, el camino no era fácil y cada día era más duro que el anterior, pero Drakar no se rendia y seguía firme para poder servir a los suyos con honor. Drakar al cumplir los 20 años, su padre le obsequio una cría de huargo de los que habían viajado con ellos desde Draenor y también los acompañaron fieles en todo su viaje hasta Kalimdor, desde ese momento el huargo se convertiría en su fiel compañero y seria como su hermano, Drakar le dio el nombre de Garra de acero, ya que sus garras sobresalían bastante y eran duras.

Al cumplir los 21 años, Drakar se separó de sus padres y dejo la ciudad de Ogrimmar, dirigiéndose a un asentamiento orco a las afueras de Durotar llamado el Cruce, quizá en ese lugar encontraría la forma de hacerse de un nombre y llenarse del honor por el cual todos los orcos viven; junto a su compañero Garra de acero, contemplaba la idea de convertirse en un criador de huargos y encontrar un destino honorable.

Editado por diacono17

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